La Mitad de la Semana y más allá

EL OBJETIVO DEL MACHO CABRÍO

El Macho Cabrío promoverá en todo el mundo un carácter idolátra, que buscara exaltar a este imperio sobre todas las cosas. La característica principal de esta idolatría es el enfoque en uno mismo. Por lo tanto, el imperio va a actuar de una manera para convencer a la gente que será en su mejor interés, someterse al dominio del imperio. Daniel revela que después de derrotar al Carnero, el reino del Macho Cabrío estará limitado a siete años. El reino del Macho Cabrío terminará con la venida del Cordero y el establecimiento del Reino de Dios. 

La Biblia llama a estos siete años una “semana”. En los primeros tres años y medio, el Macho Cabrío extenderá su influencia sobre todo el mundo y ofrecerá prosperidad y seguridad de manera que el mundo nunca ha conocido antes. Esto ayudará al objetivo del imperio que es la dominación del mundo y gobierno absoluto sobre todas las personas. Nuevamente, sólo aquellos que siguen la verdad en las Escrituras se opondrán a las características impías del Macho Cabrío.

Estas personas fieles serán cruelmente tratadas, encarceladas, torturadas y asesinadas. El imperio expresará un carácter brutal y sin misericordia que causará un gran temor entre los habitantes del mundo y traerá a todos, excepto a aquellos que creen en la Palabra de Dios y en el Cordero, a la sumisión. El objetivo principal del Macho Cabrío es frustrar la voluntad de Dios y oponer el Reino de Dios
para que no se establezca. El anticristo permitirá que el Templo se reconstruya en Jerusalén y proveerá seguridad y libertad para el pueblo judío. Después de cuarenta y dos meses de prosperidad y paz en todo el mundo, el anticristo se sentirá suficientemente seguro como para revelar sus verdaderas intenciones. 

El anticristo es Satanás encarnado. Lo que más desea es que la gente lo adore a él y no al verdadero Dios. Se ha dicho que el anticristo conoce el papel significativo que Israel debe desempeñar en el establecimiento del Reino de Dios; por lo tanto, no es sorprendente que el anticristo elegirá el Templo para revelarse a sí mismo (esta falsa comprensión de sí mismo). ¿Cuál es éste entendimiento falso? El anticristo cree ser dios y que es digno de toda adoración. Desde el momento en que este imperio se estableció hasta la mitad de los siete años, el anticristo acabará con casi toda la oposición. Con la percepción de que su imperio está firmemente establecido, el anticristo tomará una cierta acción. 

Con el funcionamiento del Templo en Jerusalén, el anticristo traerá un final abrupto a la adoración que toma lugar. El apóstol Pablo dice que el anticristo entrará en el Templo y se proclamará Dios y exigirá que el mundo lo reciba como tal. Debido a sus aparentes obras benévolas hacia Israel, asumirá que el pueblo judío le responderá favorablemente. Mientras que la mayor parte del mundo lo aceptará
fácilmente, el pueblo judío y los seguidores del Cordero no lo harán! Es después de este evento que los seguidores del Cordero serán llevados al cielo. Es importante darse cuenta que la mayoría de los creyentes en el Cordero ya habrán sido asesinados o encarcelados para este tiempo. Lo que la Biblia llama la Esperanza Bienaventurada será de hecho un acontecimiento glorioso para todos los seguidores del Cordero, tanto los vivos como los que ya están en el cielo; sin embargo, el mundo no va a percibir el significado de este evento. Con los creyentes llevados fuera de este mundo, y con Israel solo en oposición del anticristo, comenzará una horrible persecución del pueblo judío.

El Profeta Jeremías lo llama Tiempo de Angustia para Jacob (Israel). Daniel, al hablar de este mismo período de tiempo, enfatiza que va a ser el peor tiempo de sufrimiento que el pueblo judío haya vivido. De manera similar al Imperio Nazi, el anticristo intentará aniquilar a
todos los judíos. A medida que comienza esta persecución, Dios iniciará un tiempo de juicio sobre el mundo. Este juicio sucederá de manera que sin lugar a dudas se sabrá que viene de Dios. Aunque muchos intérpretes bíblicos afirman que tales manifestaciones del juicio de Dios son a través de las acciones del hombre, examinemos brevemente lo que en realidad se llevará a cabo. 

La Biblia revela que:

1. El granizo y el fuego mezclados con sangre caerán de los cielos y destruirán un tercio de los árboles en todo el mundo y su vegetación verde.

2. Lo que aparecerá como una gran montaña quemándose con fuego será arrojada al mar y un tercio de los mares se convertirán en sangre. Como resultado de ésto, una tercera parte de las criaturas de los mares morirán. Además de ésto, serán destruidos un tercio
de los barcos.

3. Un gran estrella, ardiendo como una antorcha, caerá sobre la tercera parte de los ríos y los manantiales de agua. Estas aguas se convertirán amargas y muchas personas morirán. 

4. Un tercio del Sol, de la Luna y las estrellas se oscurecerán, tanto en el día como por la noche.

5. Una estrella (ángel), descenderá del cielo hasta el abismo. Este ángel tendrá una llave con la que abrirá la fosa y saldrá humo, y subirá un tipo único de langosta. Estas “langostas” no dañarán el césped ni ningún tipo de vegetación, pero van a torturar a los individuos que no tienen el sello de Dios en sus frentes. Sólo el pueblo judío que tenga este sello podrá evitar esta tortura.

6. Cuatro ángeles, que fueron atados junto al río Éufrates, serán puestos en libertad y comenzarán una guerra. Un excesivamente gran ejército de origen único (no humano) matará un tercio de la humanidad con fuego, humo y azufre, que saldrá de sus bocas y colas.

Obviamente este tipo de suceso del juicio de Di-s no tendrá sus orígenes en la actividad humana. El propósito de estas manifestaciones claramente sobrenaturales es eliminar toda duda de la humanidad que si Dios existe o no. Es sorprendente que a pesar de toda la muerte y la devastación que sucederá, la gente no se apartará de su comportamiento idólatra ni se arrepentirá delante del Dios de Israel.

Mientras que estos juicios se llevan a cabo, los judíos seguirán siendo perseguidos severamente por el Macho Cabrio. Los que estén en Judea, huirán al desierto, a un lugar que Di-s ha preparado para ellos. Otros permanecerán en Jerusalén y éstos no serán separados de
la Ciudad Santa. Habrá un comportamiento similar entre el del Macho Cabrio y la forma en que el imperio Nazi se comportó. Incluso cuando se le hizo evidente al liderazgo Nazi que la guerra no se podía ganar, en lugar de poner fin a su matanza horrible contra el pueblo judío, verdaderamente aumentaron el esfuerzo para exterminarlos. Después de la manifestación de los seis juicios, estará claro que el Macho Cabrio está luchando contra las fuerzas del Dios Omnipotente y por lo tanto no podrá ganar; sin embargo, como los nazis, este imperio lo ignorará para su propia eliminación y seguirá centrándose en la destrucción de Israel y el pueblo judío de todo el mundo.


LA BATALLA POR JERUSALÉN

Durante las últimas décadas, han habido numerosos intentos para negociar un acuerdo de paz en el Medio Oriente. Uno de los aspectos más difíciles de llegar a tal acuerdo, es el estatus de Jerusalén. Desde 1948 y el establecimiento del Estado de Israel, Jerusalén ha estado en el corazón del conflicto y esto sólo se convertirá en una fuente de mayor antagonismo en la última mitad de la semana de Daniel (los últimos 42 meses). Hoy en día, este conflicto es principalmente entre los israelíes y los palestinos. Está claro que los israelíes modernos son los descendientes del patriarca Jacob. Pero, ¿quiénes son los palestinos? 

El profeta Abdías escribió, al igual que muchos otros, que este mundo se acabaría con una gran guerra. Abdías fue más específico que otros escritores, y reveló que esta guerra final sería entre los hijos de Jacob y los hijos de Esaú. Uno necesita recordar que según el libro del Génesis, Esaú no estaba interesado en los propósitos de Di-s; sin embargo, estaba determinado en impedir a Jacob de cumplirlos. Un pueblo descendió de Esaú y se les conocíó como Edom. Cuando se investiga este pueblo en las Escrituras, se encuentra que, al igual que Esaú, Edom contínuamente está en oposición a la voluntad de Di-s. La Biblia afirma que la tierra a que pertenece Edom es el mismo lugar de donde vinieron los palestinos. Esto es muy significativo. Estas personas simplemente emigraron a algunas de las ciudades de la antigua Israel, después de que muchos judíos huyeron de la persecución de los romanos, los musulmanes, y los cruzados, y una vez más los musulmanes. Por lo tanto, los palestinos son Edom!

En la profecía de Abdías, Dios advierte al mundo que no se unan a Edom en la lucha contra los hijos de Jacob. Lamentablemente, esta advertencia se ignorará. Al final, una gran coalición de naciones se unirá a los palestinos para atacar a Israel. Jerusalén será su objetivo, y como revela la Biblia, una gran fuerza internacional entrará en Israel desde el norte. Hay tres lugares claves donde Israel intentará mantener a raya este gran ejército. El primero es Hazor, y el segundo es Beit Shean. Estos dos lugares fueron históricamente fortalezas para mantener el control de la Tierra. Israel va a sufrir grandes pérdidas en estos dos lugares y será prácticamente derrotado. Una simbólica “última batalla” será iniciada en el tercer lugar, conocido por Meguido.

Meguido es también conocido por su nombre bíblico, Armagedón. Antes de esta guerra, Dios habrá derramado sobre el mundo siete juicios adicionales, que son más fuertes que los seis juicios anteriores; ya que estas siete plagas contienen la ira de Di-s. Una vez más, estas siete plagas serán claramente sobrenaturales y no habrá duda en la mente de las personas que vienen de Dios. ¿Cuáles son estas siete plagas?

1. Úlceras dolorosas van a aparecer en aquellas personas que tienen la marca de la bestia (imperio) y que adoran a la imagen.

2. Los mares se convertirán en sangre y todas las criaturas del mar morirán.

3. Todos los ríos y manantiales de agua se convertirán en sangre.

4. El sol comienzará a quemar a los hombres con fuego.

5. La Tierra se llenará de oscuridad, las personas rechinarán sus dientes en gran dolor y blasfemarán a Dios.

6. Las aguas del río Éufrates se secarán y tres espíritus impuros traerán a los reyes de la tierra y al mundo entero a Israel para la guerra.

7. Habrán sonidos, truenos, relámpagos y un gran terremoto.

Durante la sexta plaga, las aguas del río Éufrates se secarán y un camino se preparará para que una federación de ejércitos ataquen a Israel. Estos ejércitos estarán unidos y fácilmente tendrán victorias en Hazor y Beit Shean. Sin embargo, cuando Israel inicie su “última batalla”, la Biblia revela que Israel no estará solo. Será en Meguido (Armagedón) que el Cordero aparecerá y derrotará este vasto ejército. La batalla de Armagedón es también conocida como la guerra de Gog y Magog.

Aunque una gran batalla se llevará a cabo en Meguido, el lector necesita saber que un asedio había estado ocurriendo en contra de Jerusalén desde hace algún tiempo. La batalla de Armagedón representa un esfuerzo de poner fin a un conflicto que ha estado ocurriendo por 1.260 días, o cuarenta y dos meses o tres años y medio. Israel y el pueblo judío ha sido objeto de duras y barbáricas pruebas de sufrimiento, desde su rechazo al anticristo en el medio de la semana. El Macho Cabrío estará atacando a Jerusalén durante este período, pero debido a la importancia de la Ciudad Santa, el imperio no va a querer destruir a Jerusalén, sino capturarla.

Los palestinos, con el apoyo de cada nación, van a dirigir el ataque a Jerusalén. El profeta Zacarías revela que con el tiempo Jerusalén será tomada, las casas de los judíos serán destruidas y serán violadas las mujeres judías. Los residentes serán tomados en cautiverio, pero un pequeño número de residentes judíos permanecerán en la ciudad.

La derrota de la coalición internacional en Meguido pasará tan rápidamente que aquellos en Jerusalén ni siquiera se enterarán de lo sucedido, cuando el Mesías llega al Monte de los Olivos, ya al este de la Ciudad Santa. La venida del Cordero a Jerusalén traerá la victoria para el pueblo judío. Aunque la mayoría de los que estaban en guerra con Israel serán destruidos, las Escrituras revelan que un remanente de los gentiles va a sobrevivir y volver a Dios por la fe en el Cordero. Es importante hoy en día que las personas entiendan el actual conflicto entre los israelíes y palestinos.


EL PROBLEMA PALESTINO

Antes de tratar con los Palestinos como pueblo, afirmemos una verdad bíblica; a saber, que Dios ama a todas las personas. En otras palabras, Dios no tiene pueblos preferidos! La pregunta que debe uno plantearse no es si Dios me ama, pero si voy a ser un recipiente de Su amor. Es sólo a través de una relación de pacto con Dios que uno puede recibir Su gran y permanente amor. ¿Qué hizo que Abraham, Isaac y Jacob se convirtieran en los Patriarcas del pueblo de Dios? 

La respuesta es que persiguieron las promesas de Dios, que estaban contenidas en el pacto que primero Dios reveló a Abraham. Estas promesas de pacto fueron extendidas por Dios a los Patriarcas como una manifestación de Su amor. Por lo tanto, aquellos que quieren recibir el amor de Dios perseguirán igual este amor al comportarse de una manera que esté de acuerdo con las promesas del pacto. Esto es lo que separa Jacob de Esaú. 

¿Cómo éstas cosas se relacionan con el pueblo palestino hoy?

Uno tiene que recordar la conexión entre Esaú, su odio por el pacto de Di-s y el objetivo palestino (edomita) de hoy. Los palestinos están unificados en crear su propio Estado en el mismo lugar que la Biblia ordena a los judíos vivir. De hecho, los profetas revelan que a menos
que el pueblo judío habite esta tierra, Dios no va a establecer su reino. Satanás sabe esto y es por lo tanto que usa la creación de un Estado Palestino en su intento de frustrar los planes de Dios. Ni los palestinos ni el resto del mundo están basando sus acciones y posiciones en la verdad de las Escrituras. Por lo tanto, no es una coincidencia que el mundo apoya el plan de paz en el Medio Oriente, que consiste de dos Estados para dos pueblos. 

Aunque no existe un acuerdo hoy concerniente a las fronteras de un Estado Palestino, ni de la mayoría de las otras grandes cuestiones problemáticas que deben resolverse; hay sin embargo, un número creciente de países que están reconociendo un Estado Palestino.
Cuando uno examina de cerca las posiciones de los israelíes y los palestinos sobre estos temas principales, se hace más evidente que no hay una base para que se haga el acuerdo. Es la perspectiva común de la mayoría de las naciones y líderes políticos del mundo que si a los palestinos se les concede un Estado con las fronteras y los elementos que exigen, a continuación, se logrará la paz. En realidad, nada puede estar más lejos de la verdad. 

No hay desacuerdo en la opinión de que el futuro Estado Palestino sería Islámico. La ley islámica requiere un califato. Se requiere éste califato para gobernar sobre todas las tierras que alguna vez fueron islámicas y la escatología islámica exige que este califato reine sobre todo el mundo. En otras palabras, un Estado Judío en el Medio Oriente no puede ser tolerado por el Islam. No hay desacuerdo en este punto de vista entre musulmanes (practicantes de la ley Sharia). El desacuerdo entre musulmanes gira sobre cual es la mejor manera de destruir la Nación de Israel. Los palestinos quieren un Estado y creen que el tener su propia nación, los colocará en una mejor posición para dirigir el mundo musulmán en la destrucción de Israel. Otros musulmanes se niegan a hacer cualquier acuerdo con Israel, aunque sea temporal. Ellos, al igual que Irán, quieren desencadenar una guerra con Israel y poner fin al Estado Judío.

– Dr. Baruch Korman 

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