¿Cómo puedo discernir los Espíritus?
¿Cómo actúa el Espíritu de Dios en nuestras vidas?
En Filipenses 2:12-13 dice: “Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino ahora mucho más en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor; porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, su beneplácito.” Este es un versículo poderoso que nos recuerda que es el Espíritu de Dios quien hace la obra en nuestras vidas. Muchas iglesias hoy en día carecen de esta obra del Espíritu de Dios en ellas. Esta es una de las razones por las que la iglesia ya no tiene un testimonio poderoso. Tambien es la razon por la cual la uncion del Espiritu no es evidente en la iglesia – las señales, las maravillas, las sanidades se han ido. De hecho, el poder que se le ha dado a la iglesia para operar, es casi inexistente. Como resultado, estamos viendo mucha doctrina falsificada en la iglesia.
Los falsos espíritus son entidades demoníacas
Cuando adoramos al tipo equivocado de espíritu, estamos invitando abiertamente a la actividad demoníaca a nuestras vidas. Mucho de lo que vemos hoy en la iglesia, que se ha hecho pasar por adoración a Dios, es agradable a los demonios. Tambin, muchas cosas que han sido pasadas como el trabajo del Espiritu Santo, son el trabajo de espiritus inmundos. La iglesia se ha debilitado tanto que muchos ya no pueden discernir que espiritu viene de Dios y cual no. Asistentes a la iglesia rodando por el suelo, repitiendo lo mismo una y otra vez, o gente riendo o gritando de dolor no es evidencia de la obra del Espíritu Santo. Esto es una falsificación del espíritu y es satánico. Como creyentes, una vez más necesitamos acercarnos a Dios con temor y temblor (Isaías 66:2). Desafortunadamente, muchas iglesias han omitido enseñar esto en estos días. Esta es una de las razones por las que hay tantos maestros engañosos hoy en día.
¿Cómo podemos madurar en cuanto a discernir los espíritus?
Ser obediente a Dios, y seguirle con temor y temblor, es esencial para restaurar nuestra relación con Él. Hay una relación inherente entre “temor y temblor” y “obediencia”. Cuando hablamos de obediencia, también estamos hablando de gracia, ya que la gracia produce obediencia. Lo mismo ocurre con el temor y el temblor. Esto debería ser una llamada de atención para nosotros los creyentes. Cuando caminamos en obediencia, crecemos en nuestro don de discernir los espíritus. Esto debe hacernos comprender que necesitamos ser sumisos a las instrucciones o mandamientos de Dios. Tambien debemos entender que el temor y temblor nos hace someternos a las instrucciones de Dios – las cuales siempre estan relacionadas con la bendicion.
En Hebreos 12: 28-29 dice: “Por lo tanto, ya que estamos recibiendo un Reino que no puede ser sacudido, tengamos Gracia por la cual podamos servir a Dios”. Aquí también, la gracia es esencial para que nosotros, como herederos del Reino de Dios, sirvamos a Dios. Es a través de la gracia de Dios que podemos ser guiados por Su Espíritu y por lo tanto ser capaces de discernir los espíritus. Otra escritura útil se encuentra en Isaías 8:13: “A Jehová de los ejércitos santificarás; sea él tu temor, y sea él tu miedo”. Que Dios sea nuestro temor no es popular en muchas iglesias hoy en día. Sin embargo, necesitamos darnos cuenta de que en el Día del Juicio y sin el perdón del Mesías, temeremos. Aquí, Isaías simplemente nos está comunicando el carácter de Dios… y eso es lo que tenemos que enseñar y predicar.
